Lo primero es definir con la mayor exactitud a que nos referimos con el término "Metafísica".
El origen de la Metafísica se sitúa en Grecia en el siglo III A. de C. y se le atribuye a Aristóteles.
En sus obras aparece por primera vez la palabra Metafísica, que etimológicamente quiere decir "más allá de lo físico", aquello invisible, intangible, eterno. El término fue creado por Andrónico de Rodhas, quien en el siglo I A. de C. recopiló estas enseñanzas.
Existen muchas definiciones de Metafísica, algunas de ellas son:
"Es la parte de la filosofía que trata del Ser en si mismo, y de sus propiedades, principios y causas primeras".
"Metafísica es la ciencia que estudia la Sabiduría de todo lo que está más allá de lo percibido en el plano físico".
Para definirla de una manera más cotidiana y menos académica la podríamos calificar como una práctica científico-filosófica basada en el Amor Universal, en el Bien, la Paz y la Armonía entre todo lo que existe, animado y aparentemente inanimado, y sobre todo, en el Amor entre los seres humanos, suprema creación de la Consciencia Infinita.
La primera aproximación a la Metafísica Práctica que hoy conocemos surge en el siglo 19 de lo que se llamó el movimiento del Nuevo Pensamiento.
En esencia era una fusión de los ideales cristianos con la filososía de Oriente, en particular la proveniente de la India.
Lo podemos definir como un enfoque espiritual de orientación práctica que buscaba solucionar todos los aspectos de la vida de una persona a través del pensamiento positivo, meditación y otros métodos diversos para desarrollar la presencia de Dios en forma activa y poderosa. Sus técnicas buscaban armonizar todas las facetas de una persona: salud, prosperidad, armonía sicológica, todo tipo de problemas.
Debido a que uno de los principios básicos de este movimiento era el libre albedrío y la libertad de consciencia, sus ideas básicas se fueron expandiendo más allá de las posturas cristianas hacia una corriente mucho más amplia de espiritualidad, forjando las bases de la metafísica práctica actual.
Sus ideas centrales pueden definirse como:
- Dios creó todo lo que existe. Por lo tanto todo lo que existe y más, es Dios.
- Entonces, somos parte de Dios, estamos hechos a su imagen y semejanza. Somos Dios en Acción.
- Todo es una unidad, en el universo no hay nada separado. Sólo existe la ilusión de la separación.
- Por lo tanto, al ser todo una unidad, el Universo responde a nuestro pensamiento bajo ciertas condiciones.
- Somos responsables de lo que nos ocurre en la vida con nuestros pensamientos. El pensamiento siempre es creador.
- Alinearnos constantemente con la Fuente de Toda Creación y seleccionar nuestros pensamientos son la base para cambiar cualquier cosa en nuestra vida.
En este blog iremos conociendo en forma gradual a los líderes más importantes de este movimiento, y lo que es más importante, las numerosas técnicas que fueron diseñadas para CAMBIAR NUESTRA VIDA EN LA DIRECCIÓN QUE DESEAMOS.
